por Federico Moccia
Con Babi descubrió la magia del primer amor, Gin fue un nuevo amanecer, perfecto e inesperado. Ahora, años más tarde, Step, Babi y Gin han rehecho sus vidas y son felices. Pero el destino tiene sus propias reglas y, cuando menos se lo esperan, sus caminos vuelven a cruzarse…
Para mí fue una novela que me provocó sentimientos encontrados; Step continua su amor con Gin y aparentemente son felices y viven una vida llena de amor.
Se que debido al éxito de las dos primeras novelas, y que esta historia fue llevada a la pantalla, los lectores debieron solicitar una continuación; personalmente creo que con el final del libro dos habría sido suficiente.
Step, se casó con Gin aunque no estaba muy convencido de hacerlo, en algún punto se vuelve a encontrar con Babi, quien está tristemente casada con alguien que nunca amó y con quien tiene un hijo; y entonces Babi logra que Step vuelva a caer en sus encantos y terminan siendo amantes.
Un golpe bajo, desde mi perspectiva, para Gin porque a pesar de todo lo que Step le hizo en el libro dos ella lo perdonó y lo volvió a aceptar en su vida porque lo amaba; solo nos da a entender que Step cambio pero no aprendió; se vuelve a abrir historias viejas pero mágicamente todo se “acomoda” en favor a Step.
Además de las historias de los personajes principales, y cómo se entrelazan, creo que hay muchos personajes nuevos con mucha historia de relleno y hacen que sea difícil seguir la trama y las historias de todos.

Conclusiones de Tres veces Tú
Así como en otros libros no he encontrado nada, o casi, nada malo; en esta no logre encontrar muchas cosas buenas además del hecho de ser un tipo de novela “romántica” y de que todos pudimos tener un cierre a la historia de Babi y Step.
El final, sentimental, pero no de mi gusto; la trama y el desenlace de los personajes principales y en general como el autor decidió dar cierre a esta historia que en su primer libro me había parecido excitante, ruda y romántica, pues termino por no gustarme.
“Amor es hacer que al otro no le pese su total falta de destreza.”
“El amor nos sorprende, el amor nos obliga a hacer cosas que nunca habríamos imaginado que seríamos capaces de hacer, para bien y para mal.»